Las observo
Dormidas
La impunidad de la sombra
Me regala sus sueños
La dulzura de sus rostros
Suaves
Su tibio silencio
No puedo imaginar
Mucho menos
Concebir
Una paz más honda
Un paraíso más real
Que el puro descanso
De mis angelitos negros
Se apaciguan las voces
Los ruidos
Las dudas
El tiempo se detiene
Mientras las contemplo
Y todos los fantasmas
(los míos)
Simplemente
Se esfuman
La carraspera de Octavio
Hace 15 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario